Tarjetas diseñadas especialmente para jóvenes de entre 14 y 30 años. Son tarjetas de crédito, débito o prepago que se adaptan a sus necesidades, ritmo de vida y nivel de gastos.
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Tarjetas diseñadas especialmente para jóvenes de entre 14 y 30 años. Son tarjetas de crédito, débito o prepago que se adaptan a sus necesidades, ritmo de vida y nivel de gastos.
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Los gastos por su uso son más bajos. No cobran nada si se recarga la tarjeta con una transferencia bancaria desde cualquier lugar del mundo.
Puedes recibir directamente a tu casa una tarjeta virtual N26 Mastercard gratuita o física por pago único de 10 € (envío incluido).
Excelente opción para minimizar comisiones y gastos de mantenimiento. Brinda la facilidad de liquidar los intereses acumulados diariamente, lo que ayuda a prevenir cargos innecesarios al cierre del mes.
Sin comisiones por contratación ni renovación. Ofrece retiro de efectivo gratuito en miles de cajeros y beneficios durante viajes como un seguro contra accidentes.
Proporciona la flexibilidad de efectuar pagos tanto en Europa como en cualquier rincón del globo. Esta tarjeta destaca por su alta tasa de aceptación, convirtiéndola en la elección óptima para realizar compras en línea o efectuar reservas por Internet.
No es necesario domiciliar la nómina pero sí tener siempre dinero en cuenta y si puedes obtener descuentos y ventajas en marcas de renombre.
Tarjeta para jóvenes de entre 18 y 30 años. Se puede utilizar en establecimientos con dispositivo Visa. Extraciones sin costes en cajeros de Ibercaja.
Gratuita si tienes menos de 21 años. Financiación fácil a cómodos plazos.
Existen tarjetas de muchos tipos, pero muy pocas destinadas exclusivamente para los jóvenes. Con estas tarjetas puedes hacer compras online, utilizarlas durante las vacaciones o sencillamente, para los gastos diarios.
Las tarjetas para jóvenes o estudiantes suelen tener costes y un límite de gasto más bajo que otro tipo de tarjeta.
Si ya tienes una cuenta abierta en un banco, puedes obtener la tarjeta de crédito, débito p prepago gratuitamente.
Si eres menor de edad, tendrán tus padres que firmar por ti la solicitud y verificar si son solventes. Esto no es necesario si es una tarjeta prepago ya que solo se puede gastar la cantidad que se deposite.
Es difícil para estudiantes, aunque no imposible, solicitar una tarjeta de crédito.
Esto es debido a que los estudiantes generalmente no disponen de ingresos fijos.
En nuestro listado de tarjetas para jóvenes, tenemos algunos proveedores de tarjetas de crédito que emiten tarjetas exclusivas para estudiantes. Éstas suelen ser más baratas y ofrecen un margen de gasto limitado.
